Soy de los que apoyaron la protesta por el envenenamiento de un grupo de perros y gatos callejeros. Consciente de que estos nos protegen. Salvan vidas. Son fieles. Sin lugar a dudas, el perro es el mejor amigo del hombre. Ahora bien, señor alcalde, ¿un centro de cuidado y atención animal en zona residencial? No creo que sea lo más factible. ¿Sabía usted que esto podría provocar insalubridad? Además, según expertos, este tipo de refugios debe instaurarse en zonas no pobladas. Me opongo a carta cabal frente al salvajismo con uso de veneno cometido por las manos de hombres. Que los intereses, la politiquería, la sed de poder, la vanagloria no nos quiten la prudencia y la tolerancia. Creo que este es el momento idóneo para la creación de lazos de amor en pos de una mejor nación. Es preciso levantarnos, alzar las pancartas y hacer viral en las redes sociales. En nuestros medios de comunicación, que a pesar de su condición de animal, estos también tienen el derecho a la vida y al respeto. Otorguémosle un lugar digno, pero no en zonas residenciales, donde pueda alterarse la paz de sus pobladores.